Nacido en Torreón, Coahuila un 7 de septiembre de 1940. La trayectoria vivencial de Emilio Gutiérrez de Alba se divide en dos etapas a cuál más plenas de satisfactorias. Hasta los 20 años estuvo inmerso en el medio artístico de la región lagunera, como cantante y actor de teatro por facultades vocales e históricas. Y de ahí en adelante hasta la época actual, como periodista y escritor por vocación.
Dos distintas facetas. Y cada una en su momento a placer.
Siendo niño y adolescente, supo lo que era pisar desde templetes hasta escenarios y foros con sobrado recurso escenográfico. Se familiarizo con los telones entre telones y candilejas. Disfrutó de aplausos y vítores en salones de actos, auditorios y teatros y no se le escaparon las populares carpas predominantes todavía a mediados de siglo pasado.
Aprovecho ni más ni menos “la oportunidad de brillar como las estrellas y dar vida al artista que llevaba dentro”
A partir de sus quince años estudió bell canto. Participó en zarzuelas y obras de teatro del siglo XX, cantaba en la radio lagunera en un programa día a día de quince minutos a la una de la tarde. Patrocinado por una mueblería.
Canto en exclusivo centro nocturno del Torreón, Coahuila de finales de la década de los 50. Era la era del bolero romántico. Para su gusto y tesitura vocal prefería las canciones de corte español de Agustín Lara.
Superada la etapa juvenil, buscó y se realizó como periodista y escritor. Esto fue ya en su querida ciudad Juárez a la cual emigró en 1960.
Durante los siguientes cuarenta años en los diarios El Fronterizo, El Mexicano, El Continental, El Universal de Ciudad Juárez y El Tiempo. Se desempeñó como reportero, jefe de información y columnista, fue jefe de prensa del DIF durante la administración del alcalde José de Jesús Macías Delgado. Fue fundador y director general de una singular revista de y para niños, coeditor de otras publicaciones. Como redactor destacó como columnista, tanto de enfoque policiaco como político.

Su columna de mayor éxito fue “pistoletazos” que próximamente se convertirá en libro a
sugerencia de sus incontables lectores.
En 1979, siendo reportero del diario fronterizo, fue electo presidente de la asociación de
periodistas de Ciudad Juárez, para la gestión de 1979-1980.
Ahí puso en práctica y comenzaron a cobrar forma sus ideales de propugnar por la superación profesional de los informadores juarenses, gestionando y logrando apoyo irrestricto de licenciado Enrique Villareal Macías, rector de la universidad autónoma de ciudad Juárez para la impartición de cursos de periodismo a todos los informadores de esta frontera, socios o no de la APCJ.
Las cátedras fueron impartidas tanto por mentores de la máxima casa de estudios local como por la UNAM. Dos años después una veintena de comunicadores fue diplomada en ciencias de la comunicación a nivel técnico. Un indiscutible y valioso logro que puso término a una larga etapa de empirismo en la prensa citadina. Cuando los periodistas se hacían en la marcha, directamente en la práctica, pues todavía en los 60 y 70 no había carreras universitarias aquí y ni siquiera academias en donde pudieran tomar los más elementales cursos de redacción.
Cursos prácticos como aquel se continuaron impartiendo hasta el final del siglo XX y parte del siglo XXI, siempre en coordinado y fraterno mano a mano entre la UACJ y la APCJ.
Con el tiempo la iniciativa de Emilio Gutiérrez de Alba a favor de sus compañeros de prensa y de las nuevas generaciones de comunicadores se vio coronada con la apertura de la UACH y la UACI y la creación de carreras idóneas en ciencias de la comunicación y periodismo,
La tarea de Gutiérrez de Alba como líder de la APCJ y en beneficio de sus compañeros periodistas era ya imparable. Eran tiempos también en que las empresas periodíst… www.gabymartynoticias.com.mx